Yo: ¿Por qué me considero un lobo?

Me dijeron….¿Por qué…te consideras un lobo? ¿Qué es lo que te hace pensar que sos ese animal… oscuro y siniestro?

Por la misma razón.

Los lobos son los malos de las historias. Siempre tienen ese papel. Son oscuros, siniestros, carnívoros, los que matan a las personas, los que no tienen piedad de nadie. Los que lastiman a los demás, los que no tienen sentimientos ni corazón. Son misteriosos… callados. Aúllan cuando quieren. Aúllan cuando se comunican con los demás de su especie. Aúllan cuando están tristes, solitarios. Sienten, pero no ven eso. Nadie ve eso de los lobos. Los usan como personajes extras, como personajes malévolos, como personajes que servirán para el odio de un lector, de una persona, que conoce o tal leyenda, o tal historia, o tal novela o tal película. No vas a ver en muchos lados que a los lobos se los considere buenos. Buenos animales incapaces de lastimar como los koalas. No. Bueno, ¿Y por qué será, no? 


¿Por qué los lobos a veces son tan agresivos, por qué cazan, por qué viven solos con su propia manada en medio de la nada, en los bosques, lejos de la humanidad? Por esa misma razón. Los odian. Los echan. No los quieren. Los cazan. Los catalogan como los peores para sus ganados. Los matan. Se ríen de eso. Sólo se perdonan entre ellos. No perdonan a los humanos. Los humanos los dañaron, los lastimaron y ahora no quieren volver a acercarse a ellos. Por eso mismo tienen miedo de nosotros. Por eso mismo corren, escapan, y pocas veces los vemos.

Una vez me dijeron… ¿Acaso tenes corazón? ¿Tenes sentimientos? ¿Sabes hablar? ¿Hay algo dentro de vos, que puedas sacar por una vez en la vida? ¿Qué es lo que cruza por tu cabeza? ¿Por qué tanto silencio, por qué no cuentas lo que te daña? ¿Qué te destruye? ¿Quién te hizo así? Sos una mala persona. Siniestra. Oscura. Muy callada. Demasiado reservada, y eso significa peligro. Dijeron. Me lo dijeron. Y es la verdad. Eso es lo que me dijeron, me preguntaron, y que yo jamás respondí. ¿Qué iba a decir? ¿Qué es lo que iba a decirles, si nunca me iban a entender?

Sentí… tanta compañía en la forma de ser de los lobos. Era exactamente como ellos. A veces deseaba ser exactamente como ellos. Tener cuatro patas, ese pelaje que me protegería de todo un invierno puro, en medio del bosque, con mi manada, lejos del mundo, lejos de la humanidad que amenaza con lastimarnos.

Yo soy un lobo. ¿Por qué? Porque me consideran como los consideran a los lobos.

Locos. Siniestros. Reservados. Callados. Malos. Misteriosos. Peligrosos.

Y no es como si sólo dijera las cosas malas… también están las buenas, pero que muy pocas personas se animan a ver. ¿Por qué? Porque todos ven lo malo y así que no hace falta que les ponga lo bueno de mí.

No le van a tomar importancia.

Esta es una parte de mí. Una parte verdadera de mí. Capaz que lo entiendas o no, pero es la verdad.





Es una interpretación que muy pocas personas van a poder entender, si es posible.